Colegio Poeta Rubén Darío
Comunidad Ruberiana:
La formación académica y valorica de niños y jóvenes ha sido nuestra pasión por ya muchos años. En nuestras aulas se han anidado sueños y desde nuestros patios son muchas generaciones de estudiantes que han alzado el vuelo rumbo a un destino propio. No siempre ha sido sencillo, como en todas las familias, construir nuestra familia Ruberiana ha demandado esfuerzo, cariño y dedicación, pero estamos felices de lo que juntos hemos logrado.
Sin embargo, esta tarea hubiese sido imposible sin el apoyo de todos nuestros colaboradores, con quienes hemos tejido amistad y afecto. Es en este crisol de voluntades donde la vida nos hace transitar por momentos especiales, y este es uno de ellos.
Después de diez años, con tristeza debemos comunicar la partida de un gran colaborador. Un profesor, que desde su puesto de Director, nos aportó con su templanza y vocación, contribuyendo a la formación académica, y por sobre todo valórica de cientos de niñas y niños. No siempre fue fácil, pues como dijo un sabio: “La disciplina al comienzo parece ser causa de tristeza, pero después da fruto agradable y apacible”
Gracias a su trabajo dedicado, el Profesor Carlos Garrido Rojas nos permitió alcanzar mi sueño, y por medio de su gestión, llegar a transformarlo en una meta. Hoy podemos disfrutar del hecho concreto que nuestro Colegio Rubén Darío es uno de los mejores colegios de Maipú, y uno de los mejores colegios a nivel nacional; un tremendo mérito que debe llenar de orgullo a toda nuestra comunidad.
Hoy podemos decir con satisfacción que nuestro Colegio Poeta Rubén Darío no solo camina por el rumbo de la excelencia académica, sino de la formación de seres humanos que serán un real aporte a la sociedad, con pensamiento crítico y conciencia social, con respeto por la Diversidad y un estricto respeto por el Medio Ambiente.
Hoy podemos decir que lo que nos une es una identidad ruberiana que nos compromete transversalmente, cualquiera sea el rol que cumplamos en nuestra comunidad.
Por esto, deseo expresarle profesor Carlos Garrido, mi profunda gratitud y mis mejores deseos de éxito en todos sus emprendimientos, al tiempo que me permito recordarle que cuando un día se es ruberiano, se es ruberiano toda la vida.
Nora Galgani Cajales
Sostenedora
Colegio Poeta Rubén Darío
